Probabilidad de éxito vs. Infelicidad:

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Cuando una persona con probabilidad de éxito comete un error, lo asume y aprende la lección.
Cuando una persona sin probabilidad de éxito comete un error, les echa la culpa a otros.
Una persona con probabilidad de éxito sabe que la vida es el mejor de los maestros.
Una persona sin probabilidad de éxito se siente víctima de la vida.
Una persona con probabilidad de éxito sabe que el resultado de las cosas depende de sí misma.
Una persona sin probabilidad de éxito cree que depende de su suerte.
Una persona con probabilidad de éxito trabaja muy fuerte y genera más tiempo para sí misma y los suyos.
Una persona sin probabilidad de éxito está siempre muy ocupada y no tiene tiempo para nadie.
Una persona con probabilidad de éxito enfrenta los retos uno a uno, sin agobiarse y buscando soluciones.
Una persona sin probabilidad de éxito les da vueltas, quejándose y sin atreverse a enfrentarlos.
Una persona con probabilidad de éxito se compromete, da su palabra, y la cumple.
Una persona sin probabilidad de éxito hace promesas, no asegura nada, y cuando falla se justifica.
Una persona con probabilidad de éxito intenta siempre superarse.
Una persona sin probabilidad de éxito se excusa por no ser mejor.
Una persona con probabilidad de éxito intenta ser feliz con lo que tiene.
Una persona sin probabilidad de éxito nunca tiene suficiente.
Una persona con probabilidad de éxito escucha, comprende, y responde.
Una persona sin probabilidad de éxito sólo oye, pero sin escuchar, pensando sólo en lo que va a decir.
Una persona con probabilidad de éxito respeta a aquellos que saben más y trata de aprender algo de ellos.
Una persona sin probabilidad de éxito se resiste a aprender de aquellos que saben más y sólo se fija en sus fallos.
Una persona con probabilidad de éxito siempre busca una mejor forma de hacer las cosas.
Una persona sin probabilidad de éxito se conforma con hacerlas como siempre ha hecho.
Una persona con probabilidad de éxito es parte de la solución.
Una persona sin probabilidad de éxito es parte del problema.
Una persona con probabilidad de éxito se fija en "cómo se ve la pared en su totalidad".
Una persona sin probabilidad de éxito se fija "en el ladrillo que le toca colocar".